La periodoncia y la ortodoncia son dos tratamientos dentales diferentes que se utilizan para tratar diferentes problemas bucales. Aunque ambos tratan la salud dental, sus objetivos y métodos son distintos.

La periodoncia es el tratamiento de las enfermedades de las encías y del hueso que sostiene los dientes. La enfermedad periodontal, también conocida como enfermedad de las encías, se produce cuando las bacterias forman una placa en los dientes y las encías, causando inflamación y sangrado.

El tratamiento de periodoncia incluye limpiar y raspar los dientes para eliminar la placa y el sarro, y desinfectar las bolsas de las encías. Si la enfermedad está avanzada, pueden ser necesarias cirugías para reparar el hueso perdido y las encías dañadas.

Por otro lado, la ortodoncia es el tratamiento para corregir problemas de mordida, alineación dental y maloclusión. Los problemas de mordida pueden causar dolores de cabeza, dolor en las articulaciones de la mandíbula, desgaste dental y una sonrisa poco atractiva.

El tratamiento de ortodoncia implica el uso de brackets y alambres para mover los dientes a su posición correcta y corregir la mordida. También pueden ser utilizados alineadores transparentes, que son una alternativa más discreta.

En conclusión, la principal diferencia entre periodoncia y ortodoncia es que la primera se enfoca en tratar enfermedades de las encías y el hueso de soporte de los dientes, mientras que la segunda se enfoca en corregir la mordida y alinear los dientes. Ambos tratamientos son importantes para la salud dental y pueden ser recomendados por el dentista según las necesidades de cada paciente.

¿Cómo se relaciona la periodoncia con ortodoncia?

La periodoncia y la ortodoncia son dos ramas de la odontología que están estrechamente relacionadas entre sí.

La periodoncia se centra en la salud de las encías y los tejidos que rodean los dientes, mientras que la ortodoncia se enfoca en la alineación de los dientes y la mandíbula. Ambas áreas de especialización son importantes para mantener una buena salud bucal y mejorar la apariencia de la sonrisa.

La periodoncia es especialmente importante durante el tratamiento de ortodoncia.

Cuando los dientes están apiñados o mal alineados, pueden ser más difíciles de limpiar adecuadamente, lo que puede llevar a problemas de salud bucal como la acumulación de placa y gingivitis. La periodoncia se encarga de detectar y tratar estas condiciones en el área circundante de la encía.

A su vez, la ortodoncia puede ayudar a prevenir problemas periodontales.

Al corregir la posición de los dientes y la mandíbula, se puede evitar la acumulación de placa y preservar la salud de las encías. Además, la ortodoncia puede mejorar la mordida, lo que reduce el estrés y la presión en los dientes y las encías.

En resumen, la periodoncia y la ortodoncia son dos áreas complementarias que trabajan juntas para lograr una sonrisa saludable y hermosa.

Es importante recibir atención de ambas especialidades para garantizar una salud bucal óptima y prevenir futuros problemas periodontales o dentales. Consulte con su dentista para obtener más información sobre cómo la periodoncia y la ortodoncia pueden beneficiar su sonrisa.

¿Que te hacen en periodoncia?

La periodoncia es una rama importante de la odontología que se enfoca en la salud de las encías y el hueso que sostiene los dientes. A veces, cuando la higiene oral no es suficiente, la placa bacteriana y el sarro pueden acumularse en las encías, lo que puede provocar enfermedades periodontales como la gingivitis y la periodontitis.

Si tienes problemas en tus encías, necesitarás visitar a un periodoncista. El especialista realizará un examen dental completo para determinar el nivel de salud de tus encías y determinar cualquier problema existente. En algunos casos, la utilización de herramientas de evaluación avanzada como la radiografía periapical y la tomografía computarizada puede ser necesario.

El tratamiento de la enfermedad periodontal puede incluir la realización de una limpieza profunda de las encías, también conocida como raspado y alisado radicular, para eliminar la placa bacteriana y el sarro. Si la enfermedad ha progresado a un nivel más avanzado, puede ser necesario realizar una cirugía para reparar el daño en los tejidos de las encías y el hueso subyacente, así como realizar injertos de hueso y tejido gingival para reconstruir lo que se ha perdido.

En conclusión, el periodoncista es responsable de la evaluación y tratamiento de las enfermedades que afectan a los tejidos de soporte de los dientes. Es aconsejable visitar regularmente a un periodoncista para prevenir y detectar posibles enfermedades periodontales y mantener las encías y los dientes saludables.

¿Qué se hace en un tratamiento de periodoncia?

La periodoncia es la especialidad odontológica que se encarga del tratamiento de las enfermedades periodontales, es decir, aquellas relacionadas con los tejidos que rodean y sostienen los dientes. Un tratamiento de periodoncia puede variar dependiendo de la gravedad del caso, pero en general se pueden destacar algunas acciones fundamentales que se llevan a cabo en la mayoría de los casos.

La primera fase de un tratamiento de periodoncia consiste en la realización de una evaluación detallada de la boca del paciente, con el objetivo de detectar la presencia de algún tipo de enfermedad periodontal. Esta evaluación es fundamental para diseñar un plan de tratamiento personalizado que se adapte a las necesidades y características del paciente.

Una vez que se ha determinado el estado de salud periodontal del paciente, la segunda fase del tratamiento comienza con la eliminación de la placa bacteriana y el sarro que se han depositado en la superficie de las raíces dentales. Esta acción se conoce como raspado y alisado radicular y se realiza con la ayuda de instrumentos especializados que permiten remover el cúmulo de bacterias.

La tercera fase del tratamiento consiste en la aplicación de técnicas regenerativas y resectivas, que buscan reconstruir los tejidos afectados por la enfermedad periodontal. En el caso de la regeneración se utiliza tejido del propio paciente para reparar los daños producidos y en la resectiva se elimina el tejido dañado.

Por último, la cuarta fase del tratamiento es la fase de mantenimiento periodontal, la cual es fundamental para garantizar que la enfermedad no vuelva a aparecer. Esta fase incluye controles regulares y la realización de limpiezas profesionales cada 6 meses, con el objetivo de eliminar la placa bacteriana acumulada que no ha sido posible eliminar con la higiene bucal diaria.

En resumen, un tratamiento de periodoncia se compone de varias fases, desde la evaluación inicial del paciente hasta la fase de mantenimiento periodontal. La eliminación de la placa bacteriana y el sarro, la aplicación de técnicas regenerativas y resectivas y el mantenimiento a largo plazo son algunas de las acciones clave que se realizan en el tratamiento.