Una bola en la encía puede ser un síntoma de varias condiciones dentales y es importante tomar medidas adecuadas para tratarla. Si notas una protuberancia en tu encía, lo primero que debes hacer es programar una visita con tu dentista.

El dentista examinará la bola en la encía para determinar la causa subyacente. Puede ser algo tan simple como una inflamación o una infección en la encía, o puede ser un signo de algo más grave, como un absceso dental.

Dependiendo de la causa, el dentista puede recomendar diferentes tratamientos. Si la bola en la encía se debe a una inflamación, es posible que te recete enjuagues bucales o te dé recomendaciones para mejorar tu higiene oral. Si se trata de un absceso dental, es posible que necesites un tratamiento de conducto o incluso una extracción del diente afectado.

Mientras esperas tu cita con el dentista, existen algunas medidas que puedes tomar en casa para aliviar el malestar. Enjuagar tu boca con agua salada tibia puede ayudar a reducir la inflamación y aliviar el dolor. También puedes aplicar compresas frías en el área afectada para reducir la hinchazón.

Es importante recordar que la bola en la encía no debe ser ignorada, ya que puede empeorar con el tiempo y causar complicaciones adicionales. Además, si experimentas dolor intenso, fiebre o sangrado, debes buscar atención médica de inmediato.

Para evitar la aparición de bolas en las encías en el futuro, es fundamental mantener una buena higiene oral, cepillándote los dientes al menos dos veces al día y usando hilo dental regularmente. También es recomendable acudir a revisiones dentales periódicas para detectar cualquier problema en etapas tempranas.